• La lactancia no duele y no tiene por qué doler, no debes sufrir tu lactancia. Al contrario, es un proceso benéfico tanto para ti como para tu bebé.
• La lactancia va a libre demanda, es decir, no se hace en determinados horarios ni por franjas de tiempo específicas, es tu bebé quien estimula la producción y secreción de la leche y él te indicará cuando esté listo para comer.
• No debes pensar si lo estas haciendo mal o como lo hacen otras mamás, simplemente déjate llevar por el corazón.
• Si tienes problemas para alimentar a tu bebé, consulta con tu especialista.
• Debes alimentar a tu bebé únicamente con leche materna hasta los 6 meses de vida. A partir de este momento puedes complementar su alimentación, sin suspender la lactancia, esto no es porque tu bebé esté mal alimentado, es más para que descubra otros sabores y conozca más cosas.
• La leche materna es diferente en cada mujer y en cada mes de vida del bebé, está diseñada perfectamente para cada bebé y para cada etapa de crecimiento.
• La lactancia es más que alimento, es amor, cariño, compañía… ellos vienen acostumbrados desde el vientre a la cercanía y el calor humano, no cortes ese vínculo.
• Informate bien y no rechaces la oportunidad de amamantar a tu bebé por temores infundados.

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